Boris Espezúa Salmón, director de la Biblioteca Nacional del Perú, renunció a su cargo tras la polémica por la modificación de un libro sobre el Bicentenario dirigido a escolares. La historiadora Carmen McEvoy, autora del texto original, denunció que su trabajo fue reemplazado por uno de la presidenta Dina Boluarte en la nueva edición, sin reconocer su autoría ni la del equipo que la ayudó.
McEvoy señaló que la nueva edición no le da «ningún crédito al equipo que lo concibió», lo que ha generado un debate sobre la importancia de reconocer la autoría intelectual y la necesidad de que el Estado peruano se adhiera a las normas internacionales de derechos de autor.
Espezúa, aunque no tenía responsabilidad directa en el hecho, decidió renunciar por decoro y respeto a la comunidad intelectual.